It's never too late to be what you might have been!
It's never too late to be what you might have been

El bullying es un término en inglés que significa acoso escolar. Se refiere a todos los tipos de agresiones y maltratos, tanto físicos como verbales, que recibe un estudiante de sus compañeros durante un tiempo largo y sin ninguna razón. En otras palabras, es cuando un niño o grupo de niños molesta a otro sin parar en el colegio sólo por el placer de hacerlo.

El impacto psicológico y emocional que puede tener el bullying en un niño es altísimo. En algunos casos, la violencia escolar a la que se enfrenta puede convertir el tiempo que pasa en el colegio en un infierno.

Mi experiencia con el bullying ha sido desde ambos lados. En primaria fui víctima de bullying. Sin saber por qué ninguna de las niñas me hablaba y me hacían la vida imposible. En los recreos pasaba sola y no me dejaban jugar con ellas. Yo sufría cada mañana que me tenía que levantar para ir al colegio, sabiendo que esas niñas iban a estar ahí listas para hacerme sentir súper mal y que nadie iba a hacer nada al respecto, porque no podían obligarlas a ser mis amigas.

A pesar de que mis papás se quejaron con las “autoridades” del colegio, éstas no hacían nada. Un día mi Mami se hartó de encontrarme llorando cuando llegaba a recogerme y se metió ella a defenderme. Claro, un papá se frustra y se siente impotente de ver que a su hijo lo acosen constantemente y no poder estar ahí para evitarlo. Si los centros educativos no toman las medidas necesarias para pararlo, tarde o temprano los papás van a enfrentar a los bullies y entonces el problema se va a hacer más grande, porque ya trasciende al mundo de los adultos.

Ahora, la otra cara de la moneda. Luego de vivir esa experiencia tan fea en primaria, me cambié de colegio. Decidí que esta vez no iba a ser la víctima. Para que no me molestaran, comencé a molestar yo. Fue mi mecanismo de defensa. Me convertí en la que les ponía apodos a las demás, hice llorar más de alguna vez a alguien y lo que conseguí fue quedarme sin amigas. Eso duró sólo un par de años, porque me di cuenta de que no quería estar sola. Empecé a ser más nice con las niñas e hice muy buenas amigas que conservo hasta hoy.

¿Saben qué fue lo que hizo la diferencia y que yo cambiara? Que mis papás NUNCA me celebraron tratar mal a nadie. Cuando yo llegaba contándoles que había molestado a alguien o me expresaba despectivamente de cualquiera, me regañaban y me decían que no debía hacer eso. A la fecha, si me expreso mal de alguien porque estoy enojada, ellos me llaman la atención. Mis papás han sido el mejor ejemplo que he podido tener y gracias a ellos me convertí en una buena mujer en lugar de ser una mujer malcriada, caprichosa, consentida y que abusa de los demás.

¿Qué es lo que les quiero decir con esto? Que hay que ponerles mucha atención a los niños, porque un niño que ha sido abusado es muy probable que se convierta en un abusador en otro entorno donde se sienta más seguro. De igual forma, si no se corrige a tiempo, un niño abusivo va a crecer y va a ser en un hombre abusivo.

Se debe educar a los niños para que sean tolerantes, respetuosos y asertivos. Que digan lo que no les gusta sin hacer uso de la violencia. El bullying se debe evitar desde el hogar. Es responsabilidad de los padres educar a sus hijos. Hay formas de castigar y corregir que son mucho más efectivas que golpear o abusar verbalmente de un niño.

Por otro lado, es sumamente importante que las instituciones educativas tomen medidas para prevenir, detectar y combatir eficazmente esta amenaza. En próximas entradas continuaré hablando sobre este tema.

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