Conocí a Mariella hace unos meses por una amiga que tenemos en común. Yo estaba buscando el catering para la celebración del segundo aniversario de mi blog y me la recomendaron. Me puse en contacto con ella y muy linda y amable aceptó patrocinarlo.
Al hablar con ella y escuchar un poco sobre sus inicios, le pedí compartirla en esta sección. Realmente es admirable que ella se esforzó por hacer lo que le gustaba y abrirse su propia oportunidad de trabajo. Hay muchas mujeres para las que tener control sobre su horario para poder compartir con sus hijos es súper importante. ¡Yo voy a ser una de ellas! ¿Qué mejor forma de hacerlo que siendo su propio jefe?
Les dejo la entrevista que le hice y espero les sirva de motivación para que se animen a hacer lo que les apasiona.
Mariella, ¿siempre le gustó cocinar?
Para ser sincera no. Mi historia con la cocina inicio hace 19 años, cuando recién graduada de colegio me fui a vivir a la hermosa ciudad de San Francisco, CA, USA. Para aprender inglés como segunda lengua. Para entonces viví con una tía con quien empecé a interesarme en el arte de la cocina.
¿Qué hacían con ella?
Con ella nos dedicábamos a cocinar los domingos para tener comida el resto de la semana y así fue como empecé a enamorarme poco a poco con la cocina.
¿Cuánto tiempo estuvo viviendo en San Francisco?
En ese período un año. Luego regresé a El Salvador para quedarme a estudiar mi carrera en el país o en Guatemala, donde mis papas vivían parte del tiempo. Pero en el fondo de mi corazón yo quería regresarme a San Francisco.
¿Qué decían sus papás de ese deseo? ¿La apoyaban?
Pues en un principio no se los comuniqué y la idea era estudiar en El Salvador o Guatemala como le comenté, porque también tenía razones para quedarme. Yo ya estaba enamorada de quién actualmente es mi esposo y eso era lo que me hacía regresar.
¿Qué estudió en El Salvador?
Ingeniería industrial.
¿Qué hizo para luchar por su sueño de irse a San Francisco?
Como el deseo de regresar siempre estuvo ahí, mientras estudiaba ingeniería industrial apliqué a 3 diferentes escuelas de cocina, además de sacar todo tipo de documentación necesaria para estudiar en Estados Unidos y para pedir un préstamo bancario.
¿Fue difícil hacer todo eso? ¿Tuvo alguna complicación?
Pues un poquito, porque lo hice todo solita. lo que yo quería era aplicar y si me aceptaban y todo fluía en armonía, entonces platicar con mis papás ya con todo listo. Las opciones eran tres: 1) San Francisco, 2) Miami y 3) New York.
¿Qué sucedió cuando ya estaba todo listo?
Cuando ya había sido aceptada en las 3 escuelas, le propuse todo a mi papá. Gracias a Dios mis papás siempre me apoyaron con los estudios y me dijeron que sí.
¡Impresionante! Habiendo sido aceptada en las 3 escuelas, usted pudo elegir a cuál quería ir. ¿En qué basó su decisión?
Pues si, gracias a Dios, ¡y mi primera opción siempre fue San Francisco! Yo ya había vivido ahí, todo me era familiar y tenía a quién recurrir en caso de emergencia, etc.
¿Cómo fueron sus estudios?
Inicié mis estudios en Artes Culinarias y una de las mejores épocas de mi vida. Fueron 3 años experiencias maravillosas en el mundo culinario, conocí gente muy buena con quién todavía mantengo contacto.
¿Qué es lo que más le gustaba de San Francisco? ¿Por qué eligió esa ciudad? ¿Por la familia?
El romanticismo de la ciudad, su infraestructura, sus paisajes, la diversidad de culturas que en ella se encuentran, su riqueza culinaria, ¡y cómo no mencionar sus vinos! Además de que pesaba muchísimo contar con gente que para mí son familia.
Una vez que terminó sus estudios, ¿qué hizo? ¿Se quedó trabajando en San Francisco?
No me quedé. Mi ciclo había terminado y regresé a casarme a El Salvador. ¡Ya me habían esperado mucho! ¡Jajajaja!
Jajaja, ¡muy buena razón! De regreso en El Salvador, ¿cuáles fueron sus planes?
Cuando regresé al finalizar mis estudios, preparar mi boda y buscar trabajo.
¿Cómo chef?
No, no busqué trabajo en la cocina directamente, sino en la administración. Trabajé con Don Félix Siman, ITCA y finalmente, dónde considero fue mi escuela laboral, el Hotel Real Intercontinental.
¿No puede contar más acerca de su trabajo en el Hotel?
En el hotel trabajé como gerente de restaurante al principio y luego como gerente de banquetes sociales, un trabajo duro y pesado con largas horas de trabajo, pero en el cual aprendí muchísimo, conocí mucha gente y crecí como profesional.
¿Y qué pasaba con su vida personal?
Tuve a mi primer hijo, un ángel hermoso y el mejor regalo de vida que existe. Después de 6 años tuve mi segundo regalo de vida. Dios me dio a mi princesa. Para entonces ya trabaja en la ASI como organizadora de eventos corporativos y ferias industriales. Sin esperarlo, cuando regresé de la maternidad, me comunicaron de cambios en la organización y que mis servicios ya no eran requeridos.
¿Qué hizo entonces?
En ese momento en realidad me pregunté: “¿Y hoy que voy hacer?” No entendí en el momento que Dios no te quita de un lugar para llevarte a uno peor.
Eso es cierto. Todo lo que sucede es por una razón y Dios logra ver el panorama completo.
¡Exacto! ¡Fue lo mejor que me pudo pasar! Me obligó a reinventarme y fue cuando inicié cocinando desde mi casa y a trabajar por encargo.
¿Cómo nace la idea de poner su propia empresa?
Dos años después, habiéndome hecho de una clientela, decidimos con mi esposo abrir GUSTISIMO y probar, trabajando duro y de la mano de Dios.
¿Cómo fueron esos comienzos?
Al inicio tenia miedos, pero luego me di cuenta de que GUSTISIMO me lo dio Dios en su momento, no en el mío y que las cosas fluían tan bien porque Él abría cada puerta de par en par para que las cosas se dieran.
Definitivamente, cuando las cosas vienen de Dios, las piezas del rompecabezas comienzan a encajar. ¿Cómo está a la fecha?
Hoy en día me siento muy contenta. Cada día es una nueva experiencia. Hay días excelentes, días buenos, no tan buenos y otros que ni le cuento. El trabajo es duro, pero la realización profesional de la que gozo es enorme y el tiempo con mis hijos no tiene precio. Cuando las cosas se ponen duras, me recuerdo a mí misma que hay mucho por qué dar gracias y que todo lo que tengo lo tengo Gracias a Dios y su infinita misericordia. En resumen, a la fecha me encuentro sumamente feliz y agradecida.
Mariella, muchas gracias por compartir con nosotros parte de su historia. ¡Le deseo muchos éxitos en GUSTISIMO y en todos los proyectos que emprenda! Estoy segura que de la mano de Dios vendrán muchas más bendiciones.
Estoy segura de que esta historia va a inspirar a muchas mujeres, no sólo porque Mariella luchó por alcanzar su sueño, pero también porque su esposo la esperó a que terminara de estudiar. Es una muestra de que el amor sabe esperar y que un hombre que las ame, sabrá comprender que la realización personal y profesional es importante en la vida de una mujer.
En GUSTISIMO pueden encontrar sandwiches gourmet, ensaladas, postres y bebidas. Los cheesecakes de dulce de leche han sido mis favoritos. ¡Deliciosos! Si desean contactar a Mariella para ir a comer al local o para hacer pedidos para sus fiestas, les dejo sus datos.
Teléfono: 2243-9617
E-mail: quiero@gustisimo.com
Dirección: Calle del Mediterráneo, Local 48B, Jardínes de Guadalupe.
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