Cuando inicié el blog, nunca me imaginé el alcance ni el impacto que iba a tener. Tener un medio que me permite llegar a miles de personas es un privilegio, pero también conlleva una gran responsabilidad.
Los que siguen el blog desde sus inicios, saben que comencé compartiendo mis experiencias personales, algunos de los obstáculos que he enfrentado a lo largo de mi vida y cómo los había superado. Lo que no vislumbré en ese momento era la cantidad de personas que se iban a identificar conmigo. Eso ocurre, como me decía alguien, porque el leer sobre lo que yo vivo día a día, la hizo darse cuenta de que no estaba sola y que no somos los primeros ni los últimos a los que nos van a pasar las diferentes situaciones de la vida. Definitivamente que no a todos nos va a pasar todo, pero siempre vamos a poder encontrar a otras personas que han superado circunstancias iguales a parecidas a las nuestras y que podrán darnos una palabra de aliento o un consejo sobre cómo ellas actuaron ante eso.
Con las ideas que yo les comparto, espero poder motivar a quiénes lo leen, ayudarles a crecer e inspirarlos a ser mejores cada día. ¿Por qué les decía al principio que esto conlleva una gran responsabilidad? Porque implica “predicar con el ejemplo” y mantenerme constante en ello, implica que hay niñas que me admiran y que hay mamás que me ponen de ejemplo para sus hijas. ¡Es en efecto una enorme responsabilidad!
Hubo un tiempo en el que pensé en dejar de escribir sobre crecimiento personal, porque yo misma me sentía atascada y que no estaba siendo mi mejor versión. Me sentía un fraude, porque yo misma no estaba poniendo en práctica lo que había escrito antes. Sin embargo, me di cuenta de que no estaba bien pensar así, porque yo soy humana y eso significa que soy imperfecta y cometo errores. Lo importante es rectificar. En la vida nos caemos una y mil veces y lo que realmente vale es levantarnos cada vez y salir fortalecidos de eso.
En los últimos años lo que he aprendido es que nunca dejamos de aprender y que siempre vamos a tener margen para desarrollarnos y ser mejores personas. Siempre, siempre, siempre van a haber oportunidades para crecer. ¿De lo contrario cuál sería el sentido de la vida? También he aprendido que siempre van a aparecer nuevos obstáculos y pruebas que nos van a enseñar nuevas lecciones que son necesarias para nuestro crecimiento personal.
Si bien el poder de inspirar a otros representa una enorme responsabilidad y ser un buen modelo a seguir, también es un privilegio increíble, que da una gran satisfacción al saber que se ha tocado una vida. ¿Saben qué es lo más asombroso de esto? ¡Que TODOS, absolutamente TODOS, tenemos el poder de inspirar a otros! Cada uno lo podemos hacer con las personas que están a nuestro alrededor y poco a poco ir incrementando nuestro círculo de influencia. Empezamos en nuestra familia, luego nuestros vecinos, después nuestra comunidad y cuando menos sintamos seremos un agente de cambio que logrará que más y más seres humanos lo repliquen.
¡Gracias, Cynthia, por compartir conmigo ese post tan lindo! Tú te has convertido en una persona que me motiva a seguir dando lo mejor de mí y a darme cuenta de cómo mi trabajo está tocando vidas. Ha sido un placer enorme conocerlas a ti, tu hermana y tu Mami a través de este proyecto y ver que además de inspirarlas a cada una, las ha unido como familia. ¡Gracias por todo su cariño!
