El ser humano tiene diferentes dimensiones. Las dimensiones conscientes de nuestro cerebro representan un 5% y las inconscientes el 95%. ¡Únicamente somos conscientes del 5%! Este pequeño porcentaje nos muestra aquello que está la vista: entorno y comportamientos.
¿Cuál es la parte inconsciente? Nuestras capacidades, creencias y valores, identidad y la dimensión transpersonal (espiritual).
Robert Dilts creó un modelo para jerarquizar los NIVELES NEUROLÓGICOS de las personas basado en el modelo de Gregory Bateson.
¿Por qué es importante conocer esto? Porque únicamente los cambios en niveles de mayor profundidad afectaran a los niveles de menor profundidad, no al revés. De acuerdo a la tabla, Entorno es el nivel de menor profundidad (nivel inferior) y Transpersonal es el de mayor profundidad (nivel superior). Y justo de estos últimos niveles (Capacidades, Creencias y Valores, Identidad y Espiritual/Transpersonal) son de los que no tenemos consciencia.
A veces nos preguntamos por qué los cambios de comportamiento no son permanentes. La razón es que estamos trabajando el efecto, no la causa. La forma en la que actuamos está determinada por nuestra identidad, nuestras creencias, nuestros valores.
¿Se han dado cuenta que cambiar de entorno muchas veces no es la solución? Generalmente el problema se vuelve a presentar a dónde sea que nos movamos. Porque al cambiar de ambiente, estamos haciendo un cambio superficial, pero nosotros seguimos siendo los mismos, seguimos comportándonos de la misma manera y por eso tenemos los mismos resultados.
Para tener cambios relevantes es necesario entrar en nuestro inconsciente y traer esas dimensiones profundas a la superficie.
Existen 3 tipos de cambios que podemos hacer dependiendo de los niveles que trabajemos.
Los cambios remediativos afectan a los niveles Entorno y Comportamientos. Para mí la mejor forma de explicarlo es que estamos poniendo una curita, pero no estamos sanando.
El ENTORNO (Nivel 1) es un elemento externo a nosotros, es dónde nos desenvolvemos, con quién y cuándo. La situación con este nivel es que no tenemos mayor control sobre lo que está fuera de nosotros, sólo sobre nosotros mismos. Por eso es que, si cambiamos de ambiente, es posible que los problemas se solucionen durante un tiempo. Pero si nosotros no hemos cambiado, vamos a volver a tenerlos.
Los COMPORTAMIENTOS (Nivel 2) implican todo lo que hacemos. Desde una conducta, algo que decimos, hasta sentir y pensar. De hecho, la forma en la que actuamos depende de cómo pensamos, porque son los pensamientos los que no hacen sentir emociones que nos generen bienestar o malestar.
Luego tenemos los cambios generativos. Estos comprenden los niveles de Capacidades, Creencias y Valores.
Las CAPACIDADES (Nivel 3) se refieren a qué sé hacer bien. Es todo aquello que puedo hacer. ¿Te has preguntado para qué eres bueno y cómo has logrado hacer lo que haces? Tus capacidades son tus fortalezas, destrezas, competencias, aptitudes. Esas actividades para las cuáles tienes la habilidad y el talento. Dependiendo de nuestras capacidades, así nos vamos a comportar. Si realizamos una tarea o un trabajo para el que no tenemos la habilidad, es bastante probable que nos frustremos y tengamos actitudes negativas.
Las CREENCIAS Y VALORES (Nivel 4). Este nivel me encanta, porque trabajando aquí podemos hacer muchos cambios en los niveles de menor profundidad. No tienen idea del impacto que pueden tener las creencias y valores en nuestra vida. Lo que creemos determina cómo nos sentimos, cómo actuamos e incluso nos puede limitar en nuestras capacidades. Las creencias son convicciones que tenemos acerca de nosotros y lo que nos rodea, y son verdad para el que las cree. Si desde niños nos dijeron que no éramos buenos para algo, nos lo creemos y ni siquiera lo intentamos. Y muchas veces sí podemos hacerlo, sólo debemos cambiar la creencia. Por otro lado, tenemos los valores, que son los principios que rigen nuestra vida. Cuando nuestros valores están en conflicto y no los honramos, todo nuestro ser entra en conflicto, porque estamos cayendo en la incoherencia. El nivel de creencias es el “por qué” y los valores responden al “para qué”.
Por último, están los cambios evolutivos, que representan nuestra identidad y la dimensión transpersonal o espiritual.
La IDENTIDAD (Nivel 5) responde a la pregunta de “¿quién soy?” A veces pensamos que somos nuestras emociones. Como decir “soy enojado” y nos ponemos la etiqueta de enojados y nos identificamos de esa forma. Pero esa es sólo una creencia, porque las personas no son enojadas, las personas sienten enojo, que es diferente. Por eso es importante poner atención a los adjetivos calificativos que usamos para describirnos. Este es uno de los niveles más profundos y descubrir cuál es nuestra verdadera identidad, va a genera cambios en los niveles de menor profundidad. Aquí se encierra nuestra autoimagen y todo lo referente a esa imagen que tenemos de nosotros mismos.
Por último, tenemos el nivel más profundo, que es la dimensión TRANSPERSONAL O ESPIRITUAL (Nivel 6). Aquí debemos respondernos la pregunta de “¿qué o quién más?” Para mí este nivel es importante, porque significa que creo que hay un ser superior que me trasciende, que me motiva, que me inspira. Espiritualidad no es lo mismo que religión. Pero creo que sólo si creemos que hay algo o alguien más grande que nosotros mismos, podemos ser agradecidos y encontrar nuestro propósito en la vida. Cada uno le podemos llamar a ese ser o a ese algo como queramos.
La importancia de los Niveles Neurológicos es que nos permiten trabajar nuestras diferentes dimensiones para poder cambiar esas creencias limitantes que nos alejan de nuestros objetivos y que no nos permiten ser feliz. Lo que creemos acerca de nuestra identidad va a afectar cómo nos percibimos, de qué nos creemos capaces o incapaces, cómo nos comportamos y nos desenvolvemos en nuestro entorno.
Lo que busca el modelo es encontrar las creencias potenciadoras que nos acerquen al cumplimiento de nuestros objetivos, metas y sueños. Aunque las creencias son verdad para quien las cree, se pueden cambiar a través de la toma de consciencia y se pueden sustituir por aquellas que nos sirvan para lo que queremos alcanzar.
Si quieres hacer un cambio en tus niveles neurológicos y modificar una creencia limitante que te aleja de esa vida plena que deseas vivir, envíame un mensaje para iniciar tu proceso de transformación.
Bibliografía:
